Importaciones en divisas: una puerta abierta a los emprendedores
POR Redacción Negolution
Las nuevas medidas implementadas por el Gobierno cubano para la venta de electrodomésticos y partes automotrices en dólares tiene como uno de sus puntos más esperados y polémicos el tema de las importaciones.
Una de las principales inquietudes de los trabajadores por cuenta propia para el desarrollo de sus negocios es la incapacidad para obtener equipamiento y materias primas en el exterior, problemática que se ha incrementado a partir del congelamiento de las relaciones con los Estados Unidos. La Administración Trump dejó prácticamente inoperante su Embajada en La Habana y eliminó la emisión de las visas por cinco años; por lo que muchos emprendedores que adquirían productos traídos desde ese país tuvieron que buscar otras opciones, muchas veces más costosas.
Parte de los enormes desafíos que tiene por delante el tema de las importaciones quedaron expuestos en una publicación en Facebook de Oniel Díaz, fundador de la consultora AUGE, justo después del anuncio de las nuevas medidas.
“Si logran establecer una estructura que se maneje bajo principios empresariales, que sepa escrutar el mercado e identificar las necesidades de individuos y cuentapropistas, el límite de productos a importar rebasa los ejemplos comunes del TV de pantalla plana o el split. Hoy hay un segmento de negocios privados que importa equipos gastronómicos profesionales, componentes tecnológicos e infinidad de ítems que pudieran ofertarse aquí perfectamente. Visto desde el prisma del sector privado, las oportunidades que se abren para disponer de mejores y más variados recursos para montar un negocio son también positivas, si se gestionan bien estas decisiones”, aseguró Díaz en esta red social.
Como parte de las nuevas medidas, ha quedado entonces abierta la posibilidad para las personas naturales de importar, por el momento, solo determinados productos, a través de un grupo de 11 empresas autorizadas: Consumimport, Transimport, Maquimport, Divep, Cadena de Tiendas Caribe, Citmatel, Empresa Importadora Palco, Corporación Cimex S.A., Corporación Copextel, S.A., Servicios Automotores S.A. (Sasa) y la Empresa Comercial Caracol S.A. De esta manera, se ampliaron a tres las modalidades de importación disponibles para cubanos: directas, en régimen de depósitos de aduana, y por contratos de comisión para la venta de mercancías en consignación.
Al conocerse la noticia, una de las primeras preocupaciones fue la posible modificación en las normas aduaneras; pero las autoridades aclararon que las personas que viajaban al exterior podrían continuar realizando la primera importación anual, siempre de carácter no comercial, con pagos en pesos cubanos (CUP); mientras las siguientes importaciones seguirían abonándose en pesos cubanos convertibles (CUC).
¿Qué productos podrán importarse tras las nuevas medidas?
Esta ha sido una de las preguntas más habituales entre los emprendedores cubanos, pues la diversidad de negocios existentes en la Isla incide en las diferencias de intereses. Mientras para algunos cuentapropistas resulta vital adquirir equipos de refrigeración, para otros podría ser importante comprar impresoras. Sin embargo, según aclaró el diario Granma, las empresas importadoras únicamente traerán productos de la misma familia de las que ya se ofertan en las tiendas, “con la particularidad de que serán mercancías muy específicas”.
La “familia de productos” que ya está en venta incluye televisores de grandes formatos, refrigeradores de alta gama y capacidad, lavadoras automáticas, splits, freezers, hornos, sandwicheras y microondas; mientras, en el listado de ítems automotrices aparecen motos eléctricas, baterías, neumáticos y accesorios, unidades de moto y motores de combustión.
Según Vivian Herrera, directora general de Comercio Exterior del Ministerio de Comercio Exterior e Inversión Extranjera de Cuba (Mincex), las 11 empresas importadoras “tienen identificados mercados, productos, marcas y proveedores, así que no habría dificultad en localizar lo que desea el cliente”. Si el producto deseado por la persona se encontrara en consignación en el país “sería mucho más sencillo el procedimiento”, aseveró Herrera.
Para solicitar una importación por parte de alguna de estas 11 empresas será necesario presentar una solicitud formal, acompañada del carné de identidad, así como la tarjeta bancaria en MLC con fondos suficientes, ya que el pago se realizará de manera totalmente anticipada.
En el contrato quedarán pactados temas como la descripción del producto, la cantidad y especificaciones técnicas, y el valor de la importación incluirá el seguro, así como aranceles y gastos vinculados con la transportación, inspección y manipulación.
Uno de los objetivos del paquete de medidas es oxigenar la economía cubana con divisas que antes salían del país hacia otros mercados (Panamá, Rusia, Guyana, Haití) y que ahora se utilizarán para dinamizar la economía interna, principalmente la industria.
Sin embargo, para el economista Pedro Monreal, en un análisis publicado en su sitio personal, el perfil actual de las importaciones “por la libre” es mucho más amplio que el surtido de “gama media y baja” que ya se comercializa en el nuevo canal. De acuerdo con su criterio, se mantendrá la fuga de capital para surtir a los cubanos con otros productos.
Si en un futuro no lejano las solicitudes de importación se ampliaran más allá de la “familia de productos” ya establecidos, sería de mucho ayuda a los emprendedores cubanos. De esta forma tendrían acceso rápido y a precios ventajosos a equipamiento y materias primas que son esenciales para que este sector avance y pueda impulsar mucho más la economía nacional.