Nawe es un término tan cubano como el emprendimiento del mismo nombre, dedicado al diseño y grabado en madera, así como a diferentes artículos de uso cotidiano; vestuario, elementos decorativos y útiles del hogar.
Surgido en el año 2019, busca trasmitir conocimientos sobre obras y artistas no solo universales, sino también cubanos e intenta dar a conocer el patrimonio del grabado en madera y su amplio recorrido en nuestro país.
Actualmente, la tienda-taller sita en la avenida 51 entre las calles 58A y 58B, del capitalino municipio Playa. Con un diseño basado en íconos de la historia del arte universal y patrones costumbrista de diferentes culturas, busca no solo crear diseños llamativos, sino trasmitir y educar en base al conocimiento de esas obras y artistas.
Al inicio, representó un medio para que las hermanas y creadoras, Clara y Gabriela Valdés, pudieran ponerse a prueba como profesionales, luego de graduarse.
“Nawe educa y entretiene”
Con frecuencia, muchas personas se cuestionan por qué no tener más representación nacional del arte en el espacio; pero desde la concepción de la marca, Nawe busca lo tradicional.
“No queremos enfrascarnos en la clásica imagen de nuestro país, nos interesa incorporar conocimientos globales en un producto cubano. No estamos negando lo nacional y cultural, sino que queremos sumar y vincular ese contenido con la historia del arte universal”, referencia Gabriela Valdés, co-fundadora.
La idea de crear productos con base en íconos del arte, parte de la propia técnica de impresión del proyecto, que de por sí engloba un concepto que emerge desde el mundo del arte más que del diseño. Todo ello ha devenido en la inspiración para seleccionar patrones muy simbólicos dentro del mundo del grabado y hacer una reinterpretación de ellos utilizando esa técnica. Imprimirlos en elementos de la cotidianidad les da un nuevo valor y los recontextualiza.
Entre los diferentes productos que confecciona el espacio, se encuentran las gorras, pullovers, bolsas y cojines, que cuentan además con un diseño exclusivo.
“Tratamos de sacarle el máximo rendimiento a los materiales y hemos aprovechado las recorterías de los tejidos para confeccionar artículos más pequeños como estuches. Asimismo, hemos elaborado agendas en alianzas con otros emprendimientos relacionados con la producción sustentable. Ahora tenemos las riñoneras aprovechando también los retazos de tela que resulta un producto práctico y que ha tenido buena aceptación”, agrega Clara.
Recientemente han logrado presentarse en pasarelas, por lo que han incorporado un nuevo reto: la confección de vestuario.
“Muchos de nuestros productos resultan de alianzas con artistas cubanos donde materializamos sus propuestas y las devolvemos en nuevas piezas. Nos gustaría convertirnos en un emprendimiento que ayuda a producir obras de artistas y creadores noveles”, nos comenta.
Para Nawe, las claves del éxito están en la constancia, la perseverancia y la confianza, tras un escenario complejo como el nuestro. “Ser auténtico, crear algo novedoso y diferente que se adapte a los gustos y necesidades de las personas que lo consumen”