
Desde hace varios meses circulan productos de la línea cosmética ¡Qué negra! por la ciudad de Matanzas, una marca pensada y desarrollada por la avileña Erlys Pennycook Ramos con el objetivo de brindar nuevas formas para tratar el cabello de los hombres y mujeres afrodescendientes, que prefieren llevarlo de manera natural.
La idea de este emprendimiento no surge de manera casual. La creadora de cremas y geles sufrió las consecuencias de químicos y de alguna que otra muestra de discriminación, por lo que luego de conocer algunas fórmulas para mantener el pelo con derivados de la flora italiana, decidió regresar a Cuba y realizar un estudio con las plantas de la Isla.
Es así como surgen las ofertas de ¡Qué negra!: una crema hidratante con función reparadora, que define los rizos, aporta brillo y a la que consideran el producto estrella; el suero energizante para combatir la alopecia, estimular el crecimiento y sellar la hidratación. Además de los geles de marpacífico y majagua que fijan el peinado y ofrecen una resistencia capilar a las elevadas temperaturas cubanas.
Para Lisbety Fernández Vilson, representante de la marca en la Atenas de Cuba, esta es una nueva propuesta para mostrar con orgullo el pelo afro, no solo en el aspecto físico sino en el emocional.
“No es solo un producto. ¡Qué negra! te cambia la manera de pensar o de sentir, incluso la percepción que se tiene de sí mismo. Comenzando por el nombre, pues la palabra negro encierra una serie de códigos sociales que nos marginaban. Ahora presentamos con orgullo nuestro pelo, nuestras raíces y nuestra decisión de mostrarnos al natural y sin mediadores químicos”.
Además de la comercialización, quienes se benefician con las cremas y los geles tienen la posibilidad de participar en talleres y conferencias donde se comparten tips para sacarles mayor provecho.
“Nuestro público es variado, pero estamos apostando fuertemente por las niñas, niños y adolescentes, para que exijan que en los salones de belleza se les trate con el amor y el respeto que merecen, que no se convierta solo en la aplicación de una queratina o un desriz. Si la persona decide someterse a cualquier tratamiento para mantenerlo liso, que sea por elección y no por ausencia de opciones”, comentó Pennycook Ramos.
Ambas coinciden en que el proceso de integración al mundo de los emprendedores fue relativamente fácil por lo novedoso de las ofertas, y se mantienen dispuestas a colaborar con otros, aunque prefieren avanzar con calma.
A los miembros de la comunidad ¡Qué negra! y las actualizaciones sobre el crecimiento de la marca se les puede encontrar en Facebook y Telegram con el mismo nombre.