Doctora Galletica, un emprendimiento que apuesta por la salud

Bien sea por cuestión de moda, conciencia, o, incluso, necesidad, cada vez se hace más frecuente la aparición de pequeños negocios que apuestan por fomentar hábitos de alimentación saludable Cuba, que poco a poco han ido ganando espacio entre las prácticas de consumo de los habitantes de la isla.

Con la actual situación económica que vive el país, muchos emprendedores han echado mano de la inventiva para promover la alimentación sana en tiempos de crisis, como Ariané de la Caridad Cañas.

Estudia en sexto año de medicina y junto a su madre inició hace pocos meses un negocio de galletas sin harina de trigo, a base de yuca, con ingredientes naturales y sin conservantes.

“El día que me dieron la noticia de que me habían dado la especialidad de psiquiatría infantil para estudiar después de que me graduara decidí que definitivamente tenía que buscar una forma de vincular el emprendimeinto con lo que había estudiado”, confesó Ariané a Negolution.

Es por eso que su negocio se llama Doctora Galletica. En su propia casa y con recursos limitados aún, Ariané y María Emilia, su madre (también médico), elaboran en su tiempo libre galletas con ingredientes como anjonjolí, coco, jengibre, mantequilla de maní, sin grasas añadidas y libres de gluten.

“Queríamos que fuera un alimento saludable, pero a la vez divertido. Normalmente cuando las personas piensan en la alimentación saludable piensan solo en vegetales, cosas verdes, cosas que son un poco “aburridas” quizás, pero la alimentación saludable no tiene por qué ser aburrida, simplemente es la manera en que se presenta”, asegura.

Aunque Doctora Galletica aún se está estrenando prácticamente en el mercado cubano ya varios negocios, entre ellos gimnasios, se han interesado por sus productos, por sus bajos niveles de grasa y azúcares, y otros como Puro Maní, han establecido encadenamientos y les proveen de la mantequilla de maní que usa como materia prima para fabricar algunas galletas, o como acompañante.

“Desde el inicio nos propusimos hacer las galletas sin grasa y sin azúcar, pero entendemos que la población no está tan preparada como para consumir un producto con cero por ciento de azúcar, entonces lo que hacemos es que manejamos niveles de azúcares mínimos, entre los límites saludables, para que poco a poco el paladar se vaya adaptando, pero si el cliente es diabético o tiene alguna especificación, nos puede hacer un encargo sin azúcar como nos han hecho en ocasiones”.

Para estas emprendedoras comer sano y rico es necesario y posible. Educar en estos temas implica incidir en la cultura gastronómica de las personas, pero no resulta una meta inalcanzable. Según la opinión de María Emilia, la clave está en “buscar alternativas saludables con lo que tenemos”.

“En estos momentos hay más acceso a productos naturales y saludables que a productos industriales, porque la industria es la que ha resultado más dañada por la crisis económica”, considera María Emilia, quien es especialista en Medicina General Integral y diplomada en Nutrición.

“En la medida en que criamos o enseñamos a los niños a comer bajo de azúcar, bajo de grasa, productos naturales como estos u otros, que no tengan aditamentos superficiales, por supuesto les empezamos a cuidar la salud desde ese momento y creamos hábitos, la alimentación saludable es crear un hábito, y crear un hábito tiene un proceso, lleva tiempo”.

Por su parte, Ariané es consciente de que introducir hábitos de alimentación sana “no es algo que podamos decir que está del todo logrado, nos estamos adaptando”, pero dice que es una buena señal el hecho de que hayan surgido en los últimos años muchísimos emprendimientos que apuestan por los productos naturales.

“No solo los están promoviendo, sino que están dando las alternativas”.

Leer más Noticias

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*
*
Website