Los productos verdes se han puesto de moda, precisamente por el valor de su consumo y el impacto en la salud. Diversos han sido los emprendimientos y negocios cubanos que se han sumado a las buenas prácticas y la promoción de su uso; Verde Verde constituye un ejemplo de ello.
Lo que idearon Eva Odriozola Gonzalez y Ani Laura Pérez Santiesteban hacia diciembre del pasado año, hoy se ha convertido en un espacio que propicia el consumo de alimentos sanos.
“Verde Verde es el nombre que decidimos poner para reafirmar que todos los productos son saludables, elaborados cuidadosamente y con materias primas los más naturales posibles”, comenta Ani Laura Pérez.
La tienda se preocupa por procesos como el reciclaje y la educación a la comunidad, en aras del aprovechamiento de los envases que no representan un riesgo para el medio ambiente. Por otra parte, potencia la alimentación libre de procesos químicos que, a la larga, dañan fatalmente nuestro organismo.
El espacio ofrece dos líneas fundamentales de productos: alimenticios y cosméticos. Ambos, de la mano de pequeños emprendimientos cubanos con mucha seriedad y calidad en su terminación.
“Creemos que los productos verdes son la vía para una mejor calidad de vida. Lo hemos visto en nosotras mismas, en nuestros amigos y familias. Mantener una alimentación sana es una decisión sabía que siempre estamos a tiempo para tomar”, agrega.
Por otra parte, lograr la mantención de los proveedores se ha convertido en un reto mutuo; “ellos intentan ante las carencias de abastecimiento mantener una misma línea de productos e innovar, pero es difícil; por nuestra parte estamos llenas de fe y sabemos que siempre podremos encontrar la manera de tener nuestro espacio lleno de los productos que tanto nuestros clientes gustan”, agrega Eva.
Decidirse por este estilo de vida toma un tiempo importante. Si a las muchachas del emprendimiento les pidieran un consejo, no dudarían en decir que, darles una oportunidad a los alimentos orgánicos proporciona un estilo de vida más saludable.
“El sistema digestivo es nuestro segundo cerebro y ambos están conectados. Son tiempos en los que hay que ocuparse realmente de nosotros”.
