Fragancias artesanales de marca Clara Camalleri registran olores de Cuba
Por Danay Galletti Hernández
La marca privada Clara Camalleri, desde su sede en el capitalino municipio de 10 de Octubre, incluye en su producción de fragancias artesanales componentes naturales como hojas de tabaco, chocolate, flores, café y canela que registran los olores y la identidad de Cuba.
A partir de su incorporación al Fondo Cubano de Bienes Culturales, perteneciente al Ministerio de Cultura, el negocio dedica sus líneas y perfumes a temáticas tan diversas como leyendas asociadas al habano en la occidental provincia de Pinar del Río, artistas como Waldo Mendoza, festivales y urbes de la isla.
La constitución de este emprendimiento en 2018 tuvo como principal artífice a la ingeniera química Clara Iglesias Camalleri, asociada a ese arte de elaborar sustancias aromáticas desde la década de 1990 cuando comenzó su trayectoria profesional en la empresa Suchel Fragancia.
Fue allí donde transcurrió su entrenamiento como perfumista, una de las pocas presentes hoy en la mayor de las Antillas, sumado a su formación en la ciudad francesa de Grasse y la realización de algunos trabajos en China para la evaluación de productos destinados a mejorar la oferta de la canasta básica.
Unido a los perfumes, la marca comercializa además colonias, agua de tocador y gel desinfectante, cuya materia prima procede mayoritariamente de Europa, si bien otros elementos como algunos envases, el alcohol e ingredientes que potencian su carácter artesanal son adquiridos en la nación caribeña.
Con su asistencia al Festival Internacional del Habano hace poco más de un lustro, el negocio Clara Camalleri empezó su bregar por los eventos y, en esa oportunidad, presentaron a los amantes de los puros la fragancia Patrona del Tabaco, dedicada al célebre producto cubano.
Su creadora explicó a Negolution que la esencia contiene hojas de tabacos maceradas como elementos protagónicos y mencionó otras líneas distintivas de la marca como la Floral que incluye, por ejemplo, la Mariposa—flor nacional de Cuba—girasoles y nomeolvides.
En la nombrada como Festivales aparece Jazz Plaza, en tributo a esa cita internacional; Chocolate con Café, consagrada al evento homónimo celebrado anualmente en la oriental provincia de Guantánamo, y Cubadisco, espacio para reconocer a las mejores producciones musicales, fonográficas y audiovisuales.
Sumado a fragancias dedicadas al 500 aniversario de La Habana y otra denominada Camalleri, el negocio cuenta con 12 perfumes dedicados a los signos zodiacales y un proyecto reciente vinculado a la frescura de las uvas: el Chardonnay Summer y el Cabernet Winter, mostrado en la última edición de la Feria Internacional de Artesanía (Fiart-2023).
El equipo tiene como integrantes fundamentales a su madre Magdalena Camalleri, de 73 años; a su padre, Ramiro Iglesias, de 87 años, y a sus dos hijas; así como, personal contratado en la producción, el área de economía y ventas.
Sus elaboraciones, avaladas por el Instituto Nacional de Higiene y Epidemiología, son comercializadas en tiendas estatales como Galería Arte Habana y el Hotel Comodoro; en paralelo, esperan la materialización de acuerdos para la venta de sus creaciones en el mercado foráneo.